La limpieza dental debe realizarse una vez al año y consiste en la eliminación del sarro que se forma alrededor de los dientes. Se suele llevar a cabo con aparatos de ultrasonidos, aunque hay casos en los cuales es necesario realizarla de forma manual. Es aconsejable que todas aquellas personas que sufran este problema, el mencionado sarro, mantengan la citada frecuencia anual, como mínimo, para mantener las encías sanas y prevenir la inflamación, el sangrado o las infecciones.
Por lo general, la limpieza dental es un procedimiento indoloro. De todas formas, a algunas personas con una hipersensibilidad dental severa puede resultarles molesto. En este tipo de pacientes es aconsejable realizar el tratamiento bajo anestesia local. Del mismo modo, conviene realizar la limpieza dental con una pasta especial y luego dar unas pautas para minimizar las molestias en los primeros días posteriores al tratamiento.
Las personas desarrollan más o menos sarro por el tipo de saliva. La forma de prevenirlo es muy sencilla: se trata de tener una buena higiene dental , con una pasta de dientes adecuada, enjuagues y sobre todo el uso del hilo o seda dental (o cepillos interproximales).
